Mi esposo y yo fuimos criados en familias católicas en Colombia, y desde muy temprana edad nuestros padres nos enseñaron los principios morales fundamentales de la religión católica. Pero en abril del año 1989 fue cuando comprendimos el verdadero concepto de ser cristiano y desde entonces nuestra relación con Dios la hicimos más personal y fue en esa época cuando renacimos de nuevo como hijos de Dios en el cristianismo. Desde entonces comenzamos a escribir. José Joaquín ha escrito reflexiones acerca del amor de Dios y mensajes de esperanza para la humanidad, y yo sabios consejos para todas las familias de la tierra.

Thursday, June 20, 2013

EL MOMENTO PRESENTE


Vivamos solamente el momento presente. Nuestra entrega al Señor nuestro Dios es ya. No te bases en lo de ayer ni tampoco en lo que podrías hacer mañana. La entrega al Señor JESUCRISTO debe ser ya. Esto significa que no debes hacer dilaciones,

no debes tener excusas, y no debes postergarla porque es muy peligroso. Lo que soy yo le digo a mi Señor, mi entrega a Ti es ya
OH Dios, no quiero tardarme mas. Estoy feliz contigo, no hay dicha igual. Bendito seas por los siglos, amen. Tómame completito Señor y no dejes nada. Te quiero mucho Papa!

Cordialmente,
                   José Joaquín Agudelo
                   Marzo 10/2000
                   www.holdingheaven.blogspot.com

EL EXITO


Amigos muy queridos del Blog no olvidemos que el camino hacia el éxito no se hace pisando sobre otros, sino parando a ayudarlos. Hoy quiero hablarles sobre el éxito, para aquellos que lo han alcanzado y para quienes van en camino luchando por alcanzarlo. Se trata de una entrevista que hizo un periodista llamado Isaac
de la revista PODER a un destacado mexicano Carlos Slin Helu. Este hablando acerca del éxito dijo lo siguiente:
Yo creo que el éxito no esta en lo económico. Una persona no es de éxito porque es buen negociante, saca grado 10 en la escuela, o le va bien profesionalmente; eso es lo que menos vale. Lo que si vale es el concepto que tengamos por la familia y los verdaderos amigos. Esos que te rodean cuando saben que estas mal. Esos que cuando te ven te dan un abrazo sincero. Así que aprecia las cosas que tienen valor verdadero y no tanto material. A estos conceptos quiero agregarles una reflexión que me enseñó mi madre: El éxito no tiene nada que ver con lo que la gente se imagina. No se debe a los títulos académicos, ni a la sangre heredada, ni a la escuela donde se estudie. No se debe a las dimensiones de tu casa o cuantos carros tienes en tu cochera. No se trata si eres jefe o subordinado. Si eres gerente de clubes sociales, el éxito nada tiene que ver con el poder que ejerces. Tampoco si eres buen administrador o hablas bonito. Tu éxito no se debe a la ropa que usas o si después de tu nombre pones las siglas deslumbrantes de tu estatus social. No se trata si eres
emprendedor o si hablas varios idiomas. Tampoco si eres atractivo, joven o viejo. El éxito se debe mas bien a cuanta gente amas, a cuanta le sonríes; cuantos admiran tu sinceridad y la sencillez de tu espíritu. También a cuanta gente ayudas, a cuantos evitas lastimar, y cuanto evitas llevar rencor en tu corazón. Se trata de que tus triunfos estén incluidos en tus sueños y si tus logros no hieren a tus semejantes. También es acerca de tu inclusión con otros y no de tu control sobre los otros.
Es decir si usas tanto la cabeza como el corazón en casi todo asunto. Si escoges ser generoso en vez de egoísta; humilde en vez de arrogante; considerado en vez de soberbio; tolerante en vez de exigente. El éxito se relaciona con tu bondad, tu deseo de servir, tu capacidad de escuchar y tu capacidad de amar. No es acerca de cuantos te siguen, sino de cuantos realmente te aman. No es acerca de solo transmitir, sino cuantos te creen. Se trata de estar siempre feliz y estar siempre en el equilibrio de la justicia que conduce al bien tener y al bien estar. Se trata de tu conciencia tranquila, tu dignidad invicta y tu deseo de ser más, no de poseer más. Esto es realmente ÉXITO. Hasta aquí la entrevista.
Yo diría que todo esto es muy importante en esta Tierra, pero yo les aconsejo que busquemos un
ÉXITO en una dimensión más alta. Porque todo aquí abajo es terrenal, pasajero y efímero, en cambio el ÉXITO celestial no se acaba, es verdadero, y es heredado de JESUCRISTO. Para ganar el ÉXITO verdadero debemos perder todos los éxitos de esta Tierra, enfocarnos en JESUCRISTO entregándole todo y así de esta manera obtener la vida eterna. Este mensaje es el que tanto les hablaba mi esposo vez tras vez, ya que el quería apuntar siempre hacia el galardón, el supremo premio, el éxito verdadero. Lo mejor de todo es que el ya lo consiguió, ¡para Dios sea la gloria! ¿Y tú vas en camino hacia el verdadero ÉXITO?

Con amor,
                   María Fanny Agudelo
                   06/20/13
                   www.holdingheaven.blogspot.com

Tuesday, June 4, 2013

UNA GRAN VISION


Permítanme hermanos y amigos que les comunique algo de lo que el Señor ha hecho en mi vida. Era una mañana cualquiera cuando me encontraba orando y me cuestionaba dentro de mi acerca de lo siguiente: Yo decía como es la dicha de saber que el que salva un alma tiene segura la propia. Esto era algo que me enseñaban y me repetían mis padres vez tras vez, pero yo lo pasaba de largo y no me detenía en su significado. Hoy al reflexionar en esto en oración veo que es profundo y además es bíblico (Santiago 5:20).
Es por eso que en aquella mañana al meditar en esto me maravillaba y me decía: ¡Que bueno seria hablarle de Dios a todos nuestros semejantes para ver que resulta! Fue entonces en esa mañana cuando experimente una gran visión: Veía pasar delante de mis ojos multitudes y multitudes de gente que nadie podía contar y me preguntaba,
¿Qué era esto? Y el Señor me dejo esperando por unos momentos hasta que al fin me dijo: Estos son los que se salvan por tus oraciones. Fue tal la sorpresa que se me vinieron las lágrimas de ternura y amor, y respondí: Esto debe ser por las oraciones de los santos de los cuales yo soy el menor. Me sorprendí tanto al oír esto que me estremecía de amor y me dije: Yo tengo que creerle a mi Señor.
 
Señor yo te agradezco que me hayas incluido en el ejercito de tus santos porque en verdad yo no soy nada, soy uno cualquiera de tus criaturas que deseo seguirte con todo mi ser. Digo esto porque ante el Señor no somos nada, todo lo que El nos da es gratuito. No se que vas a ser conmigo, pero estoy feliz; mi gran deseo de entrega a Ti es completo. Mi propósito fue sellado hoy con lágrimas de amor como también debe ser la de todos los creyentes en CRISTO que hoy existimos en el mundo.

Cordialmente,
                   José Joaquín Agudelo
                   Marzo 13, 2000

UN BUEN PADRE


Queridos amigos del Blog, el 16 de Junio se celebra mundialmente el día del padre. No quiero dejar pasar esta fecha tan importante en las familias para aconsejar a todos los papas del mundo que logren leer este mensaje. La mayoría de estos consejos los saque de un libro del colombiano Gonzalo Gallo.
Un buen papa no se queda en la reprensión, sino que toma medidas para corregir el problema. No hace alarde de su poder ni habla con la cerviz erguida. El discernimiento es un don dado por Dios, este discernimiento nos permitirá a todos leer entre líneas o prever los acontecimientos.
Recuerden que cuando hacemos lo correcto con respecto a los hijos nos sentimos felices, pero cuando hacemos lo incorrecto nos sentimos miserables. Todos deberían clamar a Dios por discernimiento, es decir por tener perspectivas, sabiduría y conocimiento de lo que sucede a los hijos para poder ayudarlos en su crecimiento y sus diferentes etapas. De esta manera un padre hace la diferencia. El discernimiento no solo da una perspectiva sobre lo que debemos hacer, sino que nos capacita para guiar con confianza y visión el futuro de nuestros hijos; también nos da una honesta comprensión de nosotros mismos. Recuerden que el éxito no depende de las circunstancias externas, sino del enfoque interno que tengas; cuando este es adecuado podemos cantar y conservar la paz en

medio de cualquier problema. Esta actitud hermosea los rostros y se conservan sanas las relaciones con los hijos (Proverbios 17:22). Son muy pocas las cosas que se conocen que sean mas magnéticas que una sonrisa o una disposición alegre.
Ahora amado lector preste también atención a los siguientes consejos: Lo que comunicas a tus hijos a través de tu relación matrimonial, permanecerá con ellos por el resto de sus vidas.
Mirando como se tratan el padre y  la madre entre si, aprenderán  las mas fundamentales funciones de la vida. Todo lo que le enseñamos a nuestros hijos ya sea bueno o malo, quedara plantado en lo profundo de sus corazones. No olviden que cuando se mejora la comunicación, también mejoran las relaciones. Una buena comunicación pide serenidad y buen animo conciliador en medio de un conflicto; de esta manera se produce alegría y paz en medio de la familia. Pero para que este buen ambiente perdure se necesita a JESUCRISTO reinando en el hogar. El es la fuente de la paz y el amor.
Para terminar quiero darles otros importantes consejos para que los practiquemos diariamente:
Cuando tu hijo te quiera hablar, escúchalo.
Si te busca con su mirada, míralo.
Si te tiende sus brazos, abrázalo.
Si te sonríe, bésalo.
Si se siente solo, acompáñalo.
Si te pide que lo dejes, déjalo.
Si te pide volver, recíbelo.
Si esta en el esfuerzo, anímalo.
Si esta en el fracaso, protégelo.
Si se siente triste, consuélalo.
Si pierde toda esperanza, aliéntalo.
Y cuando se sienta autosuficiente le dirás: Busca a Dios y entrega tu corazón a JESUCRISTO.

Con amor,
                   María Fanny Agudelo  
                   06/01/13