Ten en cuenta esto: Jamás habrá escuela con maestros tan consecuentes que permitan que hayan tres o cuatro resultados distintos a un mismo problema de aritmética. Sólo puede haber uno y todo alumno que presente algo diferente está equivocado. La geometría, la biología, la química y la física son ciencias que tampoco permiten variaciones a cálculos basados en las mismas premisas, aun en el caso del amplio criterio. En competencias deportivas se insiste sobre una estricta aplicación de reglas. Los juegos se desarrollan de acuerdo con ellas sin favoritismo de ninguna clase. La menor violación al ser percibida por el árbitro anula el resultado de la jugada. Lo mismo sucede en la música en la cual hay cierto número de notas en una octava y el director de la orquesta no permite que uno de los violines se aparte ni siquiera medio tono de la nota que debe estar tocando. Si los hombres tienen que ser exactos en la aplicación de las leyes y reglas que rigen actividades, ¿no será razonable que Dios haga lo mismo? Sin embargo los hombres frecuentemente acusan a Dios, pero
sobre todo a los que llevan el mensaje de Jesucristo a sus semejantes de ser intransigentes, es decir de ser demasiado estrictos en la proclamación y aplicación del mensaje divino. Lejos de ser intransigencia es muy razonable que Dios tenga leyes inflexibles y que exija el exacto cumplimiento de ellas. Así que sería bueno recordar algunas de las leyes divinas que rigen la condición presente y futura de la humanidad. Si en las cosas de la vida necesitamos comprobar medidas y nos afanamos por lograr extrema precisión en el ajuste de maquinarias, ya que siendo descuidados estamos propensos al fracaso, cuánto más importante es poner cuidado por la vida eterna. Dios dice: El que pecare ese morirá y la paga del pecado es la muerte (Ezequiel 18:4; Romanos 6:23). Así que no hay alternativa. No se trata de discutir quién ha pecado más o quién ha pecado menos. Todo el que ha pecado irremediablemente morirá. También Dios dice: El que no naciere de nuevo no puede ver el reino de Dios (Juan 3:3). ¿Confiabas en alguna otra cosa para poder entrar al Cielo? Olvídala. El nuevo nacimiento es el requisito indispensable. El Señor Jesús dijo: Nadie viene al Padre sino por mí (Juan 14:6). ¿Pensaba usted que había otro camino hacia Dios? No lo hay. Cristo es el único que puede salvarle y lo hará tan pronto reconozcas que necesitas perdón y salvación. Acércate hoy mismo al que todo lo puede, que nos ama tanto que dio su vida por todos.
Aprovecho la celebración de Acción de Gracias en este final del mes de Noviembre para que presentemos un corazón agradecido por la magna obra que Jesús hizo por nosotros. ¡Imposible olvidar al Señor por su grande amor! Así que agradece siempre porque el agradecimiento te da el maná escondido. Ama porque el amor es la llave de la vida. Cree porque la fe es la llave de la esperanza. Sonríe porque la sonrisa es llave de la amistad. Siempre confía en Dios pues es la llave de la vida eterna.
!!!FELIZ DIA DE ACCION DE GRACIAS!!!
Con amor,
María Fanny Agudelo 11/20/2020
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