Papá, nuestros pensamientos nos llenan de alegría el corazón siempre y cuando sean para la gloria de Dios. Yo te doy las gracias porque me pones a pensar tan lindo. Tu santa presencia la siento dentro de mí. Que tengo yo para que hagas conmigo eso tan lindo. Padre, toma esta criatura que de la nada acogiste y me adornaste con pétalos de rosa en el jardín del Cielo a donde vamos a llegar. Dentro de tu corazón divino deseamos vivir. Nos sentimos bien buscándote a Ti porque no hay otro camino, no lo hay. Siento gran alegría con Vos Papa Dios. Mi corazón se llena de
contento al hablar con el dueño de nuestra vida y también de la eternidad. Si no aprovechamos estos momentos de vida nos puede pesar porque tienen mucho valor para nuestra vida espiritual. La rica mina del vivir si la supiéramos aprovechar no habría un negocio igual. Estas son delicias del Cielo que nunca se acabaran porque van dirigidas al Señor por toda la eternidad. Esas cosas del Cielo son tan hermosas y lo lindo es que el Señor nos llevara allá si lo seguimos a Él y hacemos su voluntad. Por eso queremos irnos con el Señor cuidando nuestra manera de pensar y siendo JESUS el Rey de nuestra vida no tenemos nada más que desear.
Cordialmente,
José Joaquín Agudelo G
Agosto 23, 2008
NOTA DEL ESCRITOR: Hermano y amigo querido si el tema te agrada, compártalo por favor con tus amistades. Gracias de antemano.