Hola familia y amigos de este Blog. Voy a comenzar este mensaje con el escrito de una señora paisa colombiana muy sincera, sobre todo por su lenguaje y sentimientos expresados:
“Mi mama decía, ‘claro que tiene sirvienta!’ Cuando llovía escuchaba gritar a mama, ‘la ropa, éntrela.’ También gritaba, ‘a comer’ y nadie le hacía caso. Mama también me dijo, ‘mientras estés bajo este techo me tienes que obedecer.’ Ella me llamaba por mi nombre completo cuando se enojaba. Mi madre me enseño técnicas odontológicas diciéndome, ‘si me vuelves a contestar
así, te saco los dientes.’ Ella me enseño a ahorrar diciéndome, ‘guarda esas lagrimas para cuando me muera.’ Ella me enseño lógica porque cuando yo llegaba preguntaba, ‘¿que hay para comer? Y ella me contestaba, ‘comida.’ Me enseño Matemáticas diciéndome, ‘cuando lleguemos a casa arreglamos cuentas.’ Por estas y muchas razones más yo amo a mi madre. Si tu amas a tu madre, amala ahora que la tienes y no la hagas sufrir. Inclusive puedes colocar este escrito en tu muro para que la recuerdes ahora y no cuando ya se haya ido. Lo que soy yo voy a empapar este papel con lágrimas, pues con mi rebeldía no seguí sus consejos ni le di el amor que ella merecía.”
Yo quiero contarles que esta señora es mi sobrina Marta Luz y quiero expresar a ella mis sentimientos y felicitarla públicamente porque con su escrito ella le da gloria a Dios reconociendo el valor de una madre y a la vez está alentando a todos nuestros hijos para que no caigan en el mismo error. Tengan muy claro que el papel de las mamas se asemeja mucho a JESUCRISTO quien murió por todos nosotros, al igual que las mamas damos la vida por nuestros hijos. El consejo para todos los hijos es, “oye hijo mío, la instrucción de tu padre, y no desprecies la dirección de tu madre; porque adorno de gracia serán a tu cabeza y collares a tu cuello.” (Proverbios 1: 8-9). Hagan esto en vida, en vida hijos.
Pero si ya perdiste a tu madre, sé que estas triste, pero ya nollores, ora.
No llores por lo que perdiste, lucha por lo que te queda. No llores por el que ya murió, lucha por lo que ha nacido de ti. No llores porque no te aman, lucha por quien te ama. No llores por tu pasado, lucha por tu presente. No llores por tus sufrimientos, lucha por tus alegrías. Recuerda, con todo lo que te sucede vas aprendiendo que nada es imposible con el Señor. Solo sigue a JESUCRISTO orando y esperando. Para Dios todo es posible!
¡FELIZ DIA DE LAS MADRES!
Con amor,
María Fanny Agudelo
04/25/2023
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