¿Podrá haber un pensamiento más dulce que terminado
este ratico de la vida, entraremos en un Cielo eterno que nos cubrirá por
siempre y para siempre? Y lo mejor aun, nada ni nadie nos podrá arrebatar esta
dicha de valor incalculable. Ya nos la regalaste Papa Dios, ya es nuestra y ni
un paso atrás daremos para despreciar esa riqueza de valor infinito. Tú eres
bendito Papa, obra del Señor es todo esto. No hay mejor amigo que Dios mismo.
Nos congregamos en la Tierra como también vamos a estar congregados en el
Cielo.
En aislamiento no entendemos la salvación. Entendemos que por eso nos
dijo el Señor: Donde hay 2 o 3 congregados en mi nombre, allí estoy Yo. También
entendemos que nuestro Padre Dios no nos lleva al Cielo por las malas. El Cielo
está lleno de pecadores arrepentidos quienes deciden ser obedientes y vivir
enamorados de Dios. Y el infierno también está lleno de pecadores que
desprecian la divina gracia y que han pisoteado la sangre redentora de
JESUCRISTO. Quisiéramos que a ese lugar de tormentos no llegara nadie y que en
cambio a todos nos llevara el Señor para su Reino, ¿será esto posible?
Cordialmente,
José
Joaquín Agudelo.
Septiembre
1, 2006
......A cualquiera, pues, que me confiese delante de los hombres, YO (Jesus) tambien le confesare delante de Mi Padre que esta en los Cielos. Mateo 10:32. Bien has dicho papa!!! gozate en el cielo............. G.N.
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