Sabías que Dios es el Creador de todo lo que existe y que algunas partes de su Palabra fue escrita en poema? ¿Sabías también que la palabra ‘poema’ significa ‘hechura o arte’? Así que tú eres obra de arte hecha por las Manos de Dios. Tu hechura es prodigiosa. Dios no solo te formó, sino que planeó cada día de tu vida. Eres una combinación de muchos factores diferentes, con el fin de que habitaras en este planeta Tierra sirviendo a Dios y a tus hermanos. Por eso, El antes de crearte planeó con exactitud como quería El que lo sirvieras. Así que te formó para una tarea específica y con habilidades específicas.
Recuerda que el Señor nos da asignaciones y nos equipa con lo que necesitamos para que podamos cumplirlas. Dios da a cada creyente dones especiales para que pueda colaborarle con la salvación del mundo, pero nosotros no podemos escoger, Él es quien los determina. A Él le encanta la diversidad o variedad, por eso no nos dio los mismos dones, ni los dio todos a una misma persona. Él nos manda a depender los unos de los otros.
Has pensado cuáles son tus dones o habilidades? Nosotros
debemos descubrirlos y desarrollarlos sin sentir envidia por los demás, pues somos únicos. Nuestra responsabilidad es descubrirlos, desarrollarlos y lanzarlos al servicio del Reino de Dios y de nuestros semejantes. Tú eres el único que puedes usarlos ya que nadie tiene la forma única que Dios te dio. Recuerda que Él nos hizo y boto el molde. También nos creó con atributos únicos, así que no hay caracteres equivocados, El usa todo tipo de personalidad, por ejemplo dos personas que evangelizan, una extrovertida y la otra introvertida se expresarán de manera diferente. Yo pienso que este mundo fuera muy aburrido si todos fuéramos iguales.
Si quieres que Dios te use, debes compartir tus experiencias reconociendo tus errores y temores. Esto porque las personas se animan más cuando les compartes la manera en que Dios te ayudó en tus debilidades. ¿Sabías que no debemos ocultar nuestros problemas? Porque estos se agrandan, mientras que comunicándolos y compartiéndolos se menguan. Así que no minimices ni escondas tu dolor, úsalo para ayudar a otros teniendo en cuenta que nadie es superior, nadie es inferior, nadie es igual a las otras personas. Cada ser es simplemente incomparable y único. Recuerda que Dios no trabaja para ti, pero si trabaja contigo; así que sé humilde y agradecido, permite que El guíe tu vida. Que si somos completamente diferentes es por voluntad de nuestro Alfarero Jesucristo! Dejémonos amasar de nuestro bendito Alfarero.
Con amor,
María Fanny Agudelo
08/20/25
No comments:
Post a Comment