Con el termómetro del Espíritu Santo vemos y sentimos con
gran claridad el amor del Señor JESUCRISTO en nuestras almas. Nos cubre la
presencia bendita de Dios, que quizá no sabemos recibirla y menos apreciarla en su justo valor. Son funciones del Espíritu Santo que nunca se ven, pero se sienten poderosamente en nuestra vida. ¡Bendita sea esa presencia divina! Siempre te queremos dar la honra y la gloria porque nunca nos olvidas y
permaneces siempre y para siempre con nosotros. Tengamos mucho cuidado con la paz que el Señor nos regala, desde luego que es una manifestación clara del Espíritu Santo. Despreciar la sangre derramada de JESUCRISTO no tiene perdón, según las palabras del mismo Señor JESUS. Toda actitud de desprecio a la bondad de Dios es pecado contra el Espíritu Santo y produce desasosiego y desesperación.
Cuando sentimos una alegría inmensa en nuestro corazón, esto es obra del Santo Espíritu de Dios y una semejanza o preludio de donde vamos a estar después de la muerte: El Cielo. ¿Quieres tu amigo escoger este lugar?
presencia bendita de Dios, que quizá no sabemos recibirla y menos apreciarla en su justo valor. Son funciones del Espíritu Santo que nunca se ven, pero se sienten poderosamente en nuestra vida. ¡Bendita sea esa presencia divina! Siempre te queremos dar la honra y la gloria porque nunca nos olvidas y
permaneces siempre y para siempre con nosotros. Tengamos mucho cuidado con la paz que el Señor nos regala, desde luego que es una manifestación clara del Espíritu Santo. Despreciar la sangre derramada de JESUCRISTO no tiene perdón, según las palabras del mismo Señor JESUS. Toda actitud de desprecio a la bondad de Dios es pecado contra el Espíritu Santo y produce desasosiego y desesperación.
Cuando sentimos una alegría inmensa en nuestro corazón, esto es obra del Santo Espíritu de Dios y una semejanza o preludio de donde vamos a estar después de la muerte: El Cielo. ¿Quieres tu amigo escoger este lugar?
Cordialmente,
José
Joaquín Agudelo G.
Marzo
26, 2004
www.holdingheaven.blogspot.com