Dios nos creo porque esa fue su Voluntad. Pensó en ti
y en mi desde siempre porque somos muy importantes para El; somos los únicos
que nos asemejamos a Él. El saber que existimos en la mente de Dios desde antes
de la constitución del mundo, solo eso es un gran motivo para sentirnos
felices. El Señor es la luz verdadera que ilumina las tinieblas de nuestra vida.
El nos rescato con su muerte en el madero de la cruz y pago toda la deuda contraída
por nuestros pecados. Gracias Padre Santo por ese Redentor bendito que nos
mandaste. Mi alma se hubiera perdido si no hubiera sido por el Señor
JESUCRISTO. Nuestra semejanza con el Señor es maravillosa porque podemos elegir
donde queremos pasar la eternidad. ¿Será posible que elijamos lo peor? Claro
que es posible; es por eso que el mundo sigue a satanás, quizá la mayoría. Con
esto queda uno sorprendido que sea posible hacer tan absurda elección. Pero tú
y yo nos vamos con el Señor; El se deleita con las almas que le siguen. ¡Glorifícate
con nosotros Padre Bendito! La salvación es un acto de libre aceptación; el Señor
no nos obliga a salvarnos. Ni siquiera los ángeles pudieron obtener este
beneficio. La tercera parte de ellos se rebelaron, entonces Dios creó un lugar
de tormento “Infierno” para lanzarlos eternamente. Pero lo bello Papá Dios es
que los que queremos seguirte tenemos la seguridad de que Tu nos aceptas por la
sangre redentora de JESUCRISTO. Por lo tanto es una dicha muy grande el saber
que la salvación está al alcance de nuestras manos. A nosotros solo nos
corresponde aceptarla y dar gracias a Dios por ese regalo de valor infinito.
Amigo cualquiera en el mundo, recibe este regalo ahora mismo.
Cordialmente, José Joaquín Agudelo
Diciembre
21, 2003
www.holdingheaven.blogspot.com
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