Yo no soy persona instruida ni notable en ningún campo del mundo de las letras, pero si tengo que dar gracias al Señor el deseo que ha puesto en mí de dar siempre buenos consejos a mis hermanos y amigos de acuerdo a la Palabra de Dios. Por ejemplo, “y en ningún otro hay salvación” (Hechos de los Apostoles capitulo 4 verso 12). Solo con esta frase basta, y sabemos que habla de JESUCRISTO. Amigo, no perdamos el tiempo buscando otro salvador que no lo hay; porque ningún otro nombre nos ha sido dado bajo el cielo en que podamos ser salvos. Por tanto nos vamos con JESUCRISTO y nada ni nadie podrán hacernos cambiar de parecer. Con JESUS nuestro Amigo divino y bello, el que nos compro al precio de su sangre preciosa, con El nos vamos con la seguridad de que no estamos equivocados.
Hermanos y amigos del mundo entero, a ti te aconsejo, a ti que estas allí y al otro también que esta allá, y a Uds. todos que están leyendo, les aconsejo que no seamos bobitos diciéndonos: yo pertenezco a tal o cual religión! Las religiones a la verdad no salvan. Todas deben concentrarse en el Señor JESUCRISTO. Porque eso de que mi religión no me lo permite, eso no es verdad, ¡olvídate! Somos del Señor y nada ni nadie nos pueden quitar este derecho.
Nosotros los cristianos todos aclamamos, cueste lo que nos cueste, tu santo nombre bello y hermoso hasta más no poder. Estamos felices contigo Papa! Eso de tener asegurado nuestro porvenir eterno, nos produce mucha alegría y gran gozo.
Hermanos y amigos, este mundo se acaba. No le pongamos término a esa carrera bellísima del amor porque este nunca deja de ser. Por eso es por lo que no te soltamos Papacito Dios. Por eso es por lo que ángeles y querubines dicen: Santo, Santo, Santo; y nosotros también lo decimos. Hoy no quiero extenderme mas, aun cuando no me canso de escribir acerca de este negocio tan importante como es la salvación y el amor de Dios, el mensaje de esperanza para la humanidad.
Cordialmente,
su servidor, Jose J. Agudelo. Junio 10, 2011
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